Tu bandera es mi bandera pero.



Ya nadie habla del que respeta.
Porque lealtad sigue cobrando sentido
incluso con tres copas de más.
Ya nadie habla del que sabe,
y comprende
que no
es no.
Ahora y siempre.

Ya nadie habla del enamorado
por días,
meses,
y años.
Del que ya no es tormenta
y reza a una sola mujer.

Ya nadie habla de los anticiclones,
hombres que te hacen cometa
sin cuerda de agarre
y soplan con ganas
viéndote majestuosa
sobrevolar tus miedos de un impulso.

Porque hay hombres que matan,
destrozan,
y destruyen.

Pero hay hombres que aman.
Por días,
meses,
años,
y vidas.

Que no se nos olvide.

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