En el aire.


Eso es el amor.

Echar de menos:
el éxtasis que provoca la búsqueda frenética
de la mirada des-conocida,
del subidón del beso sin aliento,
de los labios que con tiento
erizan la piel por primera vez.
El calor de la mano que aparta el pelo
y agarra la cara,
porque el mundo no se acaba,
pero lo parece porque el cielo,
luce hoy para ti.
La pausa previa
a la mirada.
La prisa del desvestir,
la ansiedad del mordisco en el lóbulo,
permitir el suspiro en el oído,
a contrarreloj.
El afán de las manos nuevas
que buscan y encuentran.
El deseo,
pecado eterno,
de libertad.

Y a pesar de ello.
A
Pesar
De
Todo
Ello.

Seguir eligiéndote
todas y cada una de las noches
al volver a casa.

Eso es el amor.

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